miércoles, 13 de enero de 2010

John Daly, un inevitable contrastePDFImprimirE-mail

John Daly, en su torneo más reciente en Australia con una figura muy cambiada.

Esta semana habrá que estar muy atentos a John Daly. El genial jugador norteamericano regresa al PGA Tour en el Sony Open de Hawaii. Muchas miradas estarán centradas en este golfista, cuya figura ha sido idolatrada por una ingente multitud de aficionados por su inimitable manera de moverse por el campo.

Daly regresa tras la suspensión que sufrió el año pasado. No pudo jugar en Estados Unidos y aprovechó para viajar y participar en torneos por Europa y rehabilitarse como jugador, después de una vida de excesos que prácticamente lo había incapacitado para el deporte...

Se sorprenderán si hace mucho tiempo que no ven a Daly. Su figura está mucho más estilizada. Asegura que ha perdido 52,5 kilos tras someterse a una operación y llevar una vida más sana. Es otro jugador, mucho más parecido al que maravilló ganando un Open Británico y un PGA Championship. "No volveré a hacer las salvajadas y locuras que solía cometer. He perdido mucho peso y me siento mucho mejor, me encuentro en un gran estado de ánimo", señaló en declaraciones al New York Times.

Daly ya anunció el año pasado en Europa que estaba jugando cada vez mejor y que se sentía con fuerzas de volver a su mejor nivel. No hay que descartar que de la primera sorpresa de la temporada en Hawaii. "Afortunadamente elegí el golf como deporte. Si hubiera sido béisbol o fútbol americano o hockey ya estaría retirado. Ahora puedo jugar siete años más en el PGA Tour (tiene 43 años) y después pasarme al Senior".

El simpático jugador, que reside en Arkansas, también ha tenido esta semana palabras para Tiger Woods. "Vive una situación desafortunada, son tiempos realmente duros para él, pero estoy seguro de que lo superará. Lo que tiene que hacer es coger su círculo de amistades y reducirlo aún más. Dejarlo en sus padres, esposas e hijos. Si me necesita estoy disponible 24 horas al día, siete días a la semana para hablar con él. El golf necesita a Tiger Woods porque eleva este deporte a unas cotas que sólo pudo en su día Jack Nicklaus".

Precisamente, el contraste radica entre Daly y Tiger. Justo cuando uno está saliendo de sus problemas, el número uno del mundo se encuentra en mitad del túnel. Es curioso también el tratamiento de los medios americanos. Están apoyando y celebrando la vuelta de Daly, mientras disparan con bala a Tiger. Claro, que a Daly sólo lo apoyaron cuando ya estaba realmente machacado.

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